Los TLCs de la UE exportan reglamentaciones comunitarias: ¿representan el orden del comercio internacional?

En los últimos dos años la Unión Europea (UE) negocia o ha concluido nueve tratados de libre comercio (TLC) con Chile (febrero 2024), India (relanzado en el 2022 a finalizar en septiembre), Indonesia (relanzado en el 2024), Kenya (junio 2023), Mercosur (diciembre 2024), México (modernizado en enero de 2025), Filipinas (marzo 2024), Singapur (julio de 2024) y Corea del Sur (marzo de 2025). Todos exportan regulaciones europeas a países que difícilmente puedan respetarlas.

El 21 de febrero el economista profesor de Harvard Jeffrey Sachs sostuvo ante el Parlamento europeo que la UE carece de una política externa común y recomendó consecuentemente la creación de un cuerpo diplomático unificado, capaz de integrarse a las negociaciones políticas y comerciales. Explicó que una diplomacia europea participaría activamente en la finalización de la guerra en Ucrania y aprovecharia los abundantes recursos del planeta para asegurar el nivel de vida europeo que, según su reporte anual lanzado este mes por el World Happiness.report, es uno de los mejores del mundo.

La propuesta atormentó a un Parlamento inmerso en diferentes estratos políticos y decantó en la nueva Comisión, determinada a aumentar el presupuesto armamentístico, temiendo según Sachs, un posible ataque ruso. El déficit diplomático europeo refleja impropiedades regulatorias la nueva generación de TLCs refugiándo a la UE en un innecesario proteccionismo.

Milongas y reciprocidades para el 2 de abril

Hacen falta dos para bailar un tango, el 2 de abril, cuando la reciprocidad rompa el equilibrio negociado del comercio internacional y empiezan las represalias. Precursoras del tango,las milongas son originarias del Mercosur y bailandolas nos enamoran pero también nos decepcionan por no ofrecer la gracia y elaboración del tango. Bailar milongas en el derecho del comercio internacional importaría no poder exigir el libre comercio u obstruir al aplicar severas regulaciones europeas de improbable cumplimiento a sabiendas de que la respuesta frente al engaño de la liberalización generá salvaguardias, represalias y más regulaciones milongueras.

El 2 abril el mayor importador del mundo aplicará aranceles recíprocos generalizados, como técnica defectuosa de un país urgido por reducir su monumental déficit comercial. Se trata de un mensaje crítico de los principios de liberalización internacional del comercio: el principal comprador se cansó de perder dinero y es hora de compensarlo. Sin demasiado éxito ni diplomacia, la UE pretende regular el orden mundial a su criterio. Hace 7 años que se relampaguean las disputas milongueras en la OMC. En junio de 2018, la UE inició un reclamo contra Estados Unidos (caso DS 548) por la aplicación de aranceles (sección 232) de 10% a 25%, sobre sus exportaciones de acero y aluminio. Tras imponer represalias la UE obtuvo una decisión favorable, pero el caso sólo se resolvió con el cambio de gobierno norteamericano. El 2 de abril se inicia otra milonga mundial de aranceles y represalias que decantan en una revisión de todos los TLCs con EEUU. La exportación regulatoria de los TLCs de la UE modificará sus dos milongas proteccionistas.

La milonga del proteccionismo digital

La nueva administración de los EEUU considera a la reglamentación de los servicios y mercados digitales de la UE (2022/2065) como una barrera comercial. Para Corea del Sur (CS) y la UE en cambio, seguir la RGPD (regulación europea 2016/279) asegura la predictibilidad de la protección del flujo de datos y de la privacidad.

El acuerdo de comercio digital EU-CS acaba de firmarse en marzo y se complementa con el acuerdo comercial bilateral de julio de 2011. Se libera el flujo digital y la localización de datos con revisión trienal, bajo el prudential carve-out de proteger el sistema financiero europeo. La cooperación regulatoria exporta las reglas europeas de marketing directo, consumidores y plataformas de empleo incluyendo el control de algoritmos.

La milonga del desarrollo sostenible como valor internacional

Un concepto fundado en la diversidad cultural y política que busca imponerse como un interés globalmente aceptado, pero curiosamente, definido en Europa. Bajo ese cncuadre, EU acusó a CS de incumplir el art.13.4.3 del TLC por no ofrecer suficiente libertad de asociación sindical, concluyendo que se alejaba de las metas establecidas.  Es indudablemente que, cuando firmó el TLC en 2011, la UE ya conocía el sistema jurídico laboral coreano.

El desarrollo sostenible comenzó como un compromiso ambiental, generando impuestos internos en Canadá por ejemplo y los TLCs europeos lo han derivado hacia cuestiones sociales, igualitarias y hasta de no discriminacion como el TLC con Chile, aumentando el precio de los medicamentos por ejemplo.  Esta milonga que no es tango, no ha reducido las desigualdades en el comercio global, sino que ha beneficiado a las importaciones chinas de productos baratos.

En principio, TLCs no propone una reducción de las desigualdades o impone una cultura determinada, sino que respeta asimetrias nacionale para aumentar el intercambio. Caso contrario, cumple un rol proteccionista. La exportación de normas nunca rindió una solución justa.

La conquista de México

Sin graves disputas comerciales y socio del CUSMA, México es un actor fundamental del agrobusiness mundial. Más competitivo y menos reglamentado que Canadá, atrajo industrias derivadas que exportan a EEUU. En el ojo europeo, se apuraron para modernizar el TLC, vigente desde enero.  Se incorporaron las regulaciones del comercio digital compitiendo con China y EEUU. Se agregaron los principios de sustentabilidad, protección de las inversiones, derechos humanos, intelectuales y un inocente proyecto de armonización ecológica proyectado hacia Latinoamérica. Como México ha ratificado 9 de las 11 convenciones fundamentales de la OIT y aprobado una reforma laboral en 2024, las milongas bailan como tango aunque no corrigiran verbigracia, el trabajo marginal mejicano (ni el europeo).

La incansable lucha mexicana contra la deforestación ilegal no deja de representar 70% de la extracción de madera, mientras que, a fin de 2025 entrará en vigor la nueva reglamentación de deforestación europea aplicable al TLC. Agregaron 350 designaciones geográficas de la UE y tan solo 20 de México, un hito de la propiedad intelectual europea. La UE conoce las regulaciones mexicanas y a pesar de ello exporta sus estándares frente a la típica templanza mejicana. Ahorita, la fuerte inversión china en México, le facilita para firmar cualquier TLC, tanto hacia el norte como hacia el este, algo que solo la diplomacia puede detectar.

Fast-track al Mercosur

Creador de la milonga, 19 años sin concluir un acuerdo con la UE, el Mercosur ha servido de protección para la industria y las exportaciones brasileñas que, el 2 de abril comenzarán a soportar el peso de la reciprocidad norteamericana, a pesar de que su principal destino ya es China. En breve el Mercosur debatirá entre la libre negociación individual de TLCs o su ruptura para que ganen dinámica las exportaciones argentinas, uruguayas y paraguayas. El texto del acuerdo UE-Mercosur quedará abierto a renegociaciones. El TLC se concluyó en las sombras, criticado por el ombudsman y los ecologistas europeos por intentar dividirlo para acelerar su ratificación violando el principio del art. 13 del Tratado de Funcionamiento. En este TLC es donde mejor se observa que la UE carece de un objetivo de libre comercio y que solo persigue regular el derecho económico internacional de forma integrativa. En el acceso a recursos naturales compite con los intereses chinos en la región, precisamente cuando dentro de la UE se cuestiona la dependencia del gigante asiatico.

La UE y Brasil trajeron un texto estandarizado a la cumbre del Mercosur de diciembre de 2024 para demostrar que podía llegarse al acuerdo finalmente, pese a que los esfuerzos comerciales de ambos se orientan hacia globalizar su comercio. Para Brasil el comercio de alimentos y la agricultura con China son prioridad y el TLC UE-Mercosur carece de volumen, pese a los excedentes exportables. El proteccionismo regulatorio y la desunión diplomática europea pierden mercados y oportunidades. Las naciones firmantes de estos TLCs se exponen a modernizar sus reglas de comercio digital, protección ecológica, seguridad y hasta discriminación social a la moda europea. Muchos de ellas no están preparados todavía o nunca lo estarán.

Paso al tango chileno

El modelo del TLC UE-Chile en cambio, fue negociado con mayor pragmatismo y conocimiento de la capacidad de cada parte, dividiendo pacíficamente lo político de lo económico. La renovación de este TLC ha modernizando el concepto de origen mediante un acuerdo interino (AIC) y aumenta la lista de productos con preferencias arancelarias, sustituyendo las pruebas de origen por un sistema de autocertificación. Sin embargo, el capítulo ecológico es muy ambicioso y el capítulo social incluye una cláusula de igualdad de género.  Finalmente incorpora el acceso de las pymes chilenas al mercado de valores europeo y contiene normas interesantes para el intercambio minero y su modelo se acerca al TLC con Canadá.

Chile es el modelo latinoamericano más avanzado hacia la liberalización comercial por sus TLCs con Norteamérica y Europa, que se ha mantenido inteligentemente al margen del Mercosur. Cabe hoy pensar que los demás países den paso al jurídicamente sincronizado tango chileno capaz de administrar la exportación de reglamentaciones europeas.